Los últimos han sido años de cambios, y esto ha demandado nuevas competencias gerenciales. La Universidad de los Andes, líder en desarrollo empresarial a nivel mundial, identificó cuáles son esas competencias en que los gerentes deberán enfocarse.
Los problemas presentes son complejos. En la actualidad, se necesita conocer los intereses e influencia de las personas involucradas con la empresa. Y es que, hoy en día, los problemas se consideran caóticos porque la respuestas se localizan en el cambio constante, no toda la información está disponible, muchas veces no es cuantificable o no existen experiencias anteriores como referencia.
Migrar a las empresas a un mundo digital no solo implica estar presentes en ese mundo (página web, redes sociales, etc.) o implementar un software (sistema contable o de administración de clientes). El pensamiento digital se centra en rediseñar la propuesta de valor de la empresa para que verdaderamente sea digital y dé lugar a la generación de nuevos productos.
Tomando en cuenta la agilidad requerida para mantenerse relevante, los gerentes precisan de ayuda a través de las redes. Ingresar a un mercado nuevo podría ser más fácil si utilizamos las redes de proveedores o clientes, las que proveen contactos útiles para ingresar a este mercado. Adicionalmente existen redes de soporte que apoyan a los gerentes en sus retos. Las redes relacionadas a las empresas incluyen clientes, proveedores, colaboradores, comunidades, influenciadores, etc.
Los nuevos consumidores se enfocan cada día más en experiencias y no tanto en productos o servicios específicos. Por ello, los gerentes deberán diseñar las rutas de experiencia de los clientes; es decir, los momentos críticos de calidad en los que los clientes definen sus niveles de satisfacción. Los consumidores se enfocan en la experiencia de sostenibilidad, a través del impacto que sus productos y servicios poseen.
Los gerentes se enfrentan al reto de mantenerse relevantes ante las necesidades de los consumidores. En este punto, es importante contar con programas de innovación, en especial de proyectos disruptivos. Estos deberán administrarse en paralelo al día a día o externalizarlo a expertos. Un modelo para externalizar este proceso es a través del desarrollo de incubadoras o aceleradores.
Durante 2019 se realizaron 2 mil 626 encuestas a los socios de las actividades de la AGG. Los principales resultados fueron:
En un mercado cambiante, la función de gerenciar evoluciona a no aferrarse a la información y el conocimiento, porque cada día se desactualiza más rápido. Por tal razón, los gerentes deben romper el paradigma de que el conocimiento es poder, porque la información cada vez posee menor vida. La competencia más importante de un gerente será la velocidad de aprender, pero más importante el desaprender lo aprendido.